Ya no es ningún secreto
Que llevaba guardado de pasión infinita
La extensión de este mundo, parecíame chiquita
Comparando el inmenso, amor que te profeso.
Sabes que tu presencia perfuma mis adentros
De esperanza y aliento, como fluido de vida
Como calida luz que atraviesa furtiva
Cerrojos y cristales, que franqueaban mi templo.
Desde el mismo momento
Que llegaste a mi cielo
Empañado por nubes, de nublada tristeza
Despejose la bruma ante tanta belleza
Inundando mí ser de ternura y consuelo.
Como aroma que el viento
Perfumando el ambiente con sutiles olores
Nos hace saborear el néctar de las flores
Edulcorando mi alma, es tu amor, como siento.
Gracias por permitirme a tu vida llegar
A olvidar mí pasado de perennes inviernos
En el tibio regazo, de tus brazos tan tiernos
Que me ofrecen la dicha. Que otra vez vuelva a amar.
Gracias... En el amor
Por ti he vuelto a creer
Con el tuyo es posible otro amor superar
Me siento liberado, de su cárcel virtual
Pensaba que en el mundo no existía otra mujer.
La borre en mi pasado. Para a ti…solo amar.
Dr. Rodríguez
Marzo 21 de 2010
